El ex gerente de la Municipalidad de Lima, José Miguel Castro, confirmo para el Equipo Especial Lava Jato que la constructora peruana realizó aportes en el 2013 con una suma superior a los 200 mil dólares para la campaña a la NO revocatoria contra la entonces burgomaestre de Lima, Susana Villarán.
Acorde al informe del diario El Comercio, la empresa peruana Graña y Montero realizó el aporte durante la campaña del NO, según el ex funcionario de la ex alcaldesa, quien es investigado por los supuestos delitos de organización criminal y cohecho pasivo en agravio del Estado. En el que los aportes para la campaña llegaron a los 7.2 millones de dólares.
Según los informes del citado medio, el investigado declaró para el fiscal Carlos Puma: ‘De ellos, US$4 millones fueron aportados por OAS, US$3 millones por Odebrecht y US$200 mil por Graña y Montero. Hernando y José Antonio Graña, aspirantes a colaborador eficaz también confirmaron el aporte económico en el año 2013, mucho antes que la empresa se adjudicara para el proyecto Vía Expresa Sur.
Acorde al informe de El Comercio, el primero fue solicitado por José Miguel Castro para un “apoyo económico” para gastos de la campaña del NO a la revocatoria. Por otro lado, José Antonio Graña dio a conocer que convoco a la consultora Chirinos y Salinas Asociados (CHISAC) para coordinar “un compromiso asumido con la Municipalidad”.