Pese a los vídeos publicados en redes sociales, ni Corea del Norte ni China han confirmado la catástrofe ni la muerte de los presentes.
Una nueva deflagración habría tomado lugar en Corea del Norte en la frontera con China. Según el video de un ciudadano, los estallidos habrían ocurrido cerca de un orfanato y la oficina de turismo; medios locales señalan que se debió a gasolina acumulada en una casa.
Ni Corea del Norte ni China hicieron declaraciones confirmando o negando sobre lo ocurrido el lunes en la ciudad norcoreana de Hyesan. The Association Press filtró un vídeo en el que aparentemente hay una explosión de menor magnitud en la que se confirmaría al menos 12 a 15 fallecidos y varios heridos. Esto pudo ser constatado por la prensa surcoreana, más no por AP de forma independiente.
El video fue grabado por Wang Bo, un agente de viajes que relató haberlo captado desde un parque en la localidad fronteriza china de Changbai. “Vi explosiones y había muchos curiosos mirando en esa dirección. No sabemos el motivo por el que había explosiones”, comentó Wang.
“Corea del Norte”:
Porque reportan explosiones en el límite entre Corea del Norte y China. pic.twitter.com/pCXMNAPGI6— ¿Por qué es Tendencia? (@porkestendencia) August 5, 2020
Pese a la evidencia gráfica, en Seúl, la agencia surcoreana de espionaje y el Ministerio de Unificación, que gestiona las relaciones con Corea del Norte, comentaron que no podían afirmar en un primer momento los reportes de explosiones. El portavoz del Ministerio de Unificación, Yoh Sangkey, señaló a la prensa que lamentaba cualquier posible víctima.
Gasolina
Aunque existen vídeos, pero ninguna autoridad lo ha podido confirmar, un medio ubicado en Seúl, Daily NK, comentó este miércoles que 15 personas habían muerto y la cifra podría subir, según fuentes en Corea del Norte que no mencionó. El medio había indicado antes que el siniestro había comenzado con gasolina acumulada en una casa de Hyesan, que prendió y provocó una explosión de una bombona de gas cercana, lo que a su vez desencadenó una serie de explosiones de bombonas de gas conectadas a otras casas.
Los medios estatales surcoreanos, que rara vez recogen los accidentes mortales en el país, no hicieron comentarios sobre las supuestas explosiones.