«El 6 de julio de se instituyó el día del maestro en el Perú, debido a la creación de la primera escuela normal para varones en 1822»
Cada año el calendario cívico escolar se viste de gala el sexto día del mes de julio para conmemorar la labor de una de las profesiones más sacrificadas y comprometidas, la de ser maestro.
Un año después de que el Perú obtenga la tan ansiada independencia, es decir en 1822; el libertador Don José de San Martín cae en cuenta que aunque la corona española ya no ata al pueblo peruano; un amo aún más destructor no los dejaba avanzar, la ignorancia. Fue así que el 6 de julio de ese mismo año, el general formó la primera escuela normal de varones. Más adelante, durante el gobierno de Odría; esta fecha se instituyó para conmemorar a todos los maestros del Perú.
La escuela creada por el libertador fue dirigida inicialmente por Diego Thompson, ex misionero y excelente maestro que impulsó el método Lancaster, este método buscaba que los alumnos más destacados enseñarán a los que iban más atrasados. Thompson también pensaba fundar la primera escuela para mujeres, pero no recibió las facilidades del caso.
Durante la época prehispánica, los incas también tenía sus propios maestros y eran llamados Amautas. Sin embargo, estos antepasados solo podían enseñar a los hijos de los nobles y del inca, puesto que se creía que solo la clase alta de su jerarquía tenía el derecho a la educación porque llegarían al poder en cualquier momento.
A lo largo de la historia y hasta nuestros días, varios docentes destacables han desfilado por las miles de aulas peruanas. Pero, dos menciones honoríficas han permitido un legado de excelentes educadores, ellos son:
- José María Arguedas (1911-1969), quien no solo tuvo una ardua y destacada participación como maestro y en el Ministerio de Educación, sino que sus obras literarias basadas en el folclore y las culturas prehispánicas aportaron de manera significativa a la educación popular.
- Francisco Izquierdo Ríos (1910 –1981), él fue un escritor y educador peruano originario de la selva amazónica, por intermedio de sus obras literarias compuestas por la sencillez y el vigor de su prosa se convirtió en el precursor de la literatura para niños. Uno de sus cuentos más conocidos fue «El Bagrecito»