Como cada 14 de julio, Francia celebró el Día de la Bastilla, esta vez el festejo fue modesto debido a las medidas de distanciamiento social por el COVID-19, sin público y sin los usuales desfiles de tanques y tropas, el presidente Emanuel Macron ofreció una ceremonia en la Plaza de la Concordia, en la cual homenajeo a los militares y al personal médico quienes están en primera línea luchando contra el Coronavirus.
La fiesta nacional que se lleva a cabo cada año en los Campos Elíseos, en conmemoración a la Revolución Francesa (1789), contó con un desfile de 2000 militares y 2500 invitados, conformados por personal sanitario, familiares de personal sanitario fallecidos, profesores, cajeros, agentes funerarios, policías, gendarmes, bomberos, y asalariados de fábricas de máscaras. “Deseo, con todos los franceses, con todos los Ejércitos mismos, rendir un vibrante tributo a los trabajadores de la salud y a aquellos que, en todos los sectores, han permitido que continúe la vida pública, social y económica” anunció el presidente desde la Plaza de la Concordia, lugar que fue el escenario por primera vez.
Fuegos artificiales mas no público, ha decido el gobierno francés cautelosamente, pues ha cancelado el tradicional espectáculo en la Torre Eiffel, para trasladarlo al parque ubicado a lado, el cual permanecerá cerrado, para solo ser transmitido por la televisión.
Después de la ceremonia, el presidente se mostró a favor del uso obligatorio de mascarillas en lugares públicos cerrados, además reflexiono acerca de los rebrotes de COVID-19 que podría sacudir nuevamente a Francia. El mandatario francés también prometió un plan de recuperación masiva de al menos 100.000 millones de euros, para reactivar los niveles, educativos, culturales, ecológicos y local.
PROTESTAS EN MEDIO DEL DÍA NACIONAL DE FRANCIA
Masivas protestas se han registrado en diferentes partes de París, como rechazo a la gestión de Emanuel Macron en medio de la pandemia por el Coronavirus. Mientras Macron busca homenajear al personal médico en el Día de la Bastilla, los sindicatos de trabajadores médicos salieron a las calles de la capital francesa para denunciar la falta de equipo y personal en los hospitales.
Las manifestaciones también estuvieron conformadas por franceses que culpan al presidente de beneficiar a las clases altas, han provocado enfrentamientos entre la policía y los ciudadanos, quienes fueron dispersados con gases lacrimógenos, desde el lunes en la noche se han visto actos de vandalismo en parte de la ciudad.