Con 96 años de edad, el hermano de Benedicto XVI, Georg Ratzinger, también ordenado sacerdote, falleció en la ciudad de Ratisbona, donde vivió toda su vida hasta su deceso. Su hermano Joseph Ratzinger intentó visitar a su hermano el pasado 18 de junio, que ya se encontraba moribundo. Así, el ex pontífice quedaría como el único miembro de su familia con vida.
«Desde el principio de mi vida mi hermano siempre ha sido para mí no sólo un compañero, sino también un guía fiable. Ha sido para mí un punto de orientación y referencia con la claridad y la determinación de sus decisiones. Siempre me mostró el camino a seguir, incluso en situaciones difíciles», mencionó agradecido el ex Pontífice el 22 de agosto de 2008.
En vida
Georg Ratzinger nació en Pleiskirchen, Baviera, el 15 de enero de 1924. Desde su juventud tenía un gran vínculo con la iglesia. A los 11 años, tocaba el órgano en una iglesia parroquial local. En 1935, ingresa al seminario menor de Traunstein, no obtante, en 1942 se alistó en el Reichsarbeitsdienst, y más tarde en el Wehrmacht. En 1945, fue capturado prisionero en Nápoles durante unos meses. Posteriormente, tras su liberación, en 1947, junto a su hermano, entró al seminario del Herzogliches Georgianum en Munich para, finalmente, ser ordenado sacerdote junto a su hermano y 40 compañeros más en la catedral de Freising el 29 de junio de 1951, por el cardenal Michael Von Faulhaber.
En cuanto a su vida personal, era considerado un hombre franco y poco acostumbrado a la diplomacia. Dada su gran cercanía a su hermano, se declaró abiertamente contrario a su elección como sumo pontífice, ya que esto significaría severos reajustes en cuanto a su relación.
«Debo admitir que no me lo esperaba y me quedé un poco decepcionado… Debido a sus gravosos compromisos, comprendí que nuestra relación tendría que reajustarse mucho. En cualquier caso, detrás de la decisión humana de los cardenales está la voluntad de Dios, y a esto debemos decir que sí», mencionó en aquella oportunidad.
Fallecimiento
Aunque las causas de su deceso no han sido esclarecidas por la diósesis de Ratisbona, el sacerdote se encontraba en un grave estado de salud varios meses antes. Dada la emergencia del Coronavirus, se le imposibilitó visitar al papa emérito el 16 de abril por su cumpleaños, como era costumbre. No obstante, el 18 de junio, lo recibe en lo que sería su lecho de muerte en Munich.